La ecografía es una herramienta esencial con
múltiples aplicaciones en los pacientes renales. Además de tratarse de un
método diagnóstico muy informativo e incruento, es el vehículo mediante el cual
podemos realizar determinadas intervenciones sobre el riñón, como la biopsia
renal. Asimismo, es imprescindible para realizar diversas intervenciones no
estrictamente renales, pero sí de la competencia del nefrólogo, como la
implantación de vías centrales para hemodiálisis o el manejo de la fístula para
hemodiálisis. Y además nos permite visualizar las arterias para diagnosticar de
forma precoz la existencia de enfermedad arterial subclínica o la evolución de
la enfermedad ateromatosa en el caso de su existencia, que como sabemos es la
base de la mayoría de eventos cardiovasculares, y de mortalidad en la población
general y mucho más en la renal. Por ello, es
imprescindible que el nefrólogo aprenda la técnica de ecografía para poder
realizarla e interprete las exploraciones ecográficas en aras de un manejo más
integral y eficiente de sus pacientes. La
implantación adecuada en tiempo y forma del catéter para diálisis peritoneal
condiciona el pronóstico del paciente y de la técnica. El nefrólogo está
capacitado para la colocación y retirada de los catéteres peritoneales y, de hecho,
en algunos servicios españoles así ocurre. El conjunto de las actividades anteriores se denomina Nefrología Diagnóstica e Intervencionista (NDI), subespecialidad de la Nefrología en expansión, desde que se acuñara su denominación y contenidos en el año 2000. Existe una importante demanda de formación en este campo entre los nefrólogos españoles. En la mayoría de los Servicios de Nefrología, estas actividades son delegadas a otras unidades o servicios, existiendo una creciente insatisfacción, al ver que las necesidades de atención clínica de sus pacientes no son cubiertas en forma adecuada. La implantación de la NDI no sólo supondría una notable mejoría asistencial, sino también un impulso a la especialidad, haciéndola más atractiva a futuros residentes y, probablemente, una mejora en las salidas profesionales. Estamos convencidos de que la creación de este Grupo de Trabajo en Nefrología
Diagnóstica e Intervencionista sin duda dará un gran impulso a la difusión de
esta disciplina y permitirá una mayor participación de los nefrólogos españoles
en la misma. |
|